Ojalá que algún día,
en la mañana al despertar
haya cambiado un poco el mundo
y una sorpresa nos pueda dar.
Que no haya odio ni guerra
que no exista llando y maldad
que en el pasado esté olvidado
lo que a tantos pudo matar.
Y que al abrir las cortianas
mientras veamos el sol
descubramos un mundo
con un nuevo resplandor.
Que las aves vuelen,
que los niños jueguen
que no se tenga miendo
a escuchar el cañón.
Que los cantos alegres,
de quienes se quieren,
nos abran las puertas
de la liberación.
Y entre tantas sonrisas,
seamos testigos
del día esperado
que alfín llegó
Este nuevo despertar,
lleno de amor y paz
nos abrirá las puertas
de una nueva realidad.
Blog de Alhena Alfaro: Poesía, tertulia, fotografía,cuentos, reflexiones, pareja y novela. Un espacio para divagar
viernes, 29 de abril de 2011
Reflejos... (2002)
En penumbra y ante el espejo, decidió
preguntarse quién era y quién quería ser,
se encontró con su pasado y descubrió que sin querer,
el mundo lo había cambiado y no lo quiso creer.
Trató de mentirse nuevamente y entonces recordó,
que pensó cambiar el mundo, y el mundo lo cambió.
Exploró por un largo rato, la triste situación y finalmente descubrió
que su esencia aúnb era la misma.
Sólo la había escondido por temor a perderla
y había sido tan habil, que casi, olvidó su existencia
preguntarse quién era y quién quería ser,
se encontró con su pasado y descubrió que sin querer,
el mundo lo había cambiado y no lo quiso creer.
Trató de mentirse nuevamente y entonces recordó,
que pensó cambiar el mundo, y el mundo lo cambió.
Exploró por un largo rato, la triste situación y finalmente descubrió
que su esencia aúnb era la misma.
Sólo la había escondido por temor a perderla
y había sido tan habil, que casi, olvidó su existencia
Sueño de un adios (2001)
Soñaré un solo instante,
con tu rostro que es mi sol;
y viviré eternamente,
deseándote mi amor.
Pasarán mil estacas por mi lado,
de esas que no ve la razón
y en un hondo suspiro,
se detendrá mi corazón.
Habrá pasado tanto,
habrá ocurrido poco
y en un solo instante
acabará del todo.
Esa magia tan deseada,
mas nunca obtenida
esas ganas de abrazarte,
se quedarán dormidas.
¡Oh eterno momento!
no te me escapes ahora,
y si ya llegó la hora
haz parar el reloj.
Congelada en esa mirada,
que más de mil veces deseé,
mirando al infinito
de sus ojos al atardecer.
Te daré un adiós,
el cual nunca olvidaré,
pues con el dolor de mi alma,
yo te lo diré.
Y los días que soñé contigo,
en el pasado quedarán,
comenzaré otra vida
y tú nunca lo sabrás.
Para tí nada habrá pasado,
todo seguirá como acostumbra,
mas muy en el fondo,
nacerá en tí una duda.
¿Y qué ocurrirá
cuando te falte algo
cuando sientas en el fondo,
que todo ya ha acabado?
Mirarás al pasado,
intentando regresar
y para ese entonces,
nada lograrás.
con tu rostro que es mi sol;
y viviré eternamente,
deseándote mi amor.
Pasarán mil estacas por mi lado,
de esas que no ve la razón
y en un hondo suspiro,
se detendrá mi corazón.
Habrá pasado tanto,
habrá ocurrido poco
y en un solo instante
acabará del todo.
Esa magia tan deseada,
mas nunca obtenida
esas ganas de abrazarte,
se quedarán dormidas.
¡Oh eterno momento!
no te me escapes ahora,
y si ya llegó la hora
haz parar el reloj.
Congelada en esa mirada,
que más de mil veces deseé,
mirando al infinito
de sus ojos al atardecer.
Te daré un adiós,
el cual nunca olvidaré,
pues con el dolor de mi alma,
yo te lo diré.
Y los días que soñé contigo,
en el pasado quedarán,
comenzaré otra vida
y tú nunca lo sabrás.
Para tí nada habrá pasado,
todo seguirá como acostumbra,
mas muy en el fondo,
nacerá en tí una duda.
¿Y qué ocurrirá
cuando te falte algo
cuando sientas en el fondo,
que todo ya ha acabado?
Mirarás al pasado,
intentando regresar
y para ese entonces,
nada lograrás.
Esperanza (2001)
Pedazo de luna llena,
que ilumina la vereda
y allí, contemplando la arena
recurro al desván del ayer.
Buscando sonrisas pasadas,
recordando más de mil miradas
me quedo hipnotizada
en un mar que interroga
Y es que el abismo es tan grande
y las fuerzas para nadar tan pocas
que espero llegar a la orilla
sin ser parte de la corriente loca.
Pintaré de azul mi universo
con nubes violetas lo haré,
par que así quede grabado,
para siempre el atardecer.
No me quedaré sin luz,
si esta se fuera, tengo una vela
la cual predo cada vez
que el sol se esconde por sus penas.
que ilumina la vereda
y allí, contemplando la arena
recurro al desván del ayer.
Buscando sonrisas pasadas,
recordando más de mil miradas
me quedo hipnotizada
en un mar que interroga
Y es que el abismo es tan grande
y las fuerzas para nadar tan pocas
que espero llegar a la orilla
sin ser parte de la corriente loca.
Pintaré de azul mi universo
con nubes violetas lo haré,
par que así quede grabado,
para siempre el atardecer.
No me quedaré sin luz,
si esta se fuera, tengo una vela
la cual predo cada vez
que el sol se esconde por sus penas.
Sin título 11 (12 de diciembre de 2001)
Vaya infinidad,
dos gritos y un silencio.
Atardederes que caen
ante la magia de la luna.
Señora de la noche,
que ilumina la penumbra,
millares de estelas
que viajan por el tiempo.
Trayendo consigo,
de ilusión, simple momento.
Cual si fuese un beso reclamado,
hacia los cuatro vientos.
Y la quietud de la laguna
se agita cual tormena,
las hojas van cayendo
sobre la banca ya vacía.
A lo lejos suena una canción
oh dulce melodía!
vuelve como melancolía
con recuerdos del ayer.
Yo no pedí que el tiempo pase,
más aún, lo quise detener.
Pero mientras yo parpadeaba,
el tiempo se me fue.
Cual gato frente a su presa,
del ataque no avisó
y por esperar aquí sentada,
no lo ví, hasta que me tocó.
Tarde, al amandecer llega,
la luna pronto se esconderá
el silencio ya no suena
pajarillos comenzaron a cantar.
Y la ventana, persiste abierta
por si un alma llega
o logro yo escapar.
Le tengo miedo a la tiniebla,
que el sol nos pueda dar.
dos gritos y un silencio.
Atardederes que caen
ante la magia de la luna.
Señora de la noche,
que ilumina la penumbra,
millares de estelas
que viajan por el tiempo.
Trayendo consigo,
de ilusión, simple momento.
Cual si fuese un beso reclamado,
hacia los cuatro vientos.
Y la quietud de la laguna
se agita cual tormena,
las hojas van cayendo
sobre la banca ya vacía.
A lo lejos suena una canción
oh dulce melodía!
vuelve como melancolía
con recuerdos del ayer.
Yo no pedí que el tiempo pase,
más aún, lo quise detener.
Pero mientras yo parpadeaba,
el tiempo se me fue.
Cual gato frente a su presa,
del ataque no avisó
y por esperar aquí sentada,
no lo ví, hasta que me tocó.
Tarde, al amandecer llega,
la luna pronto se esconderá
el silencio ya no suena
pajarillos comenzaron a cantar.
Y la ventana, persiste abierta
por si un alma llega
o logro yo escapar.
Le tengo miedo a la tiniebla,
que el sol nos pueda dar.
Intentado escribir (10 de octubre de 2001)
Inspiración, te siento ausente
y ya no se cómo volverte a encontrar,
hoy todo es tan distinto
que no se dónde estás.
Las miradas ya no son las mismas,
las palabras no se sienten igual.
Y aunque el viento es el mismo de antes,
parece que algo hizo todo cambiar.
Y contemplarte, a tí, infinito
me quita las ganas de soñar
porque me hundo en tu abismo,
y ya no se cómo escapar.
Por qué te fuiste al acercarte,
por qué te marchaste sin avisar,
así como pájaro de la mañana,
cantaste por gusto de cantar.
Me quedé desconcertada,
sintiendo el agua helada de un mar
y en la obscuridad bajo mi nuve,
decidí el examen comenzar.
Qué eres tú hoy en día?
Terrón de azucar o trozo de sal?
Quizás, solamente una palabra,
que me quedé sin pronunciar.
y ya no se cómo volverte a encontrar,
hoy todo es tan distinto
que no se dónde estás.
Las miradas ya no son las mismas,
las palabras no se sienten igual.
Y aunque el viento es el mismo de antes,
parece que algo hizo todo cambiar.
Y contemplarte, a tí, infinito
me quita las ganas de soñar
porque me hundo en tu abismo,
y ya no se cómo escapar.
Por qué te fuiste al acercarte,
por qué te marchaste sin avisar,
así como pájaro de la mañana,
cantaste por gusto de cantar.
Me quedé desconcertada,
sintiendo el agua helada de un mar
y en la obscuridad bajo mi nuve,
decidí el examen comenzar.
Qué eres tú hoy en día?
Terrón de azucar o trozo de sal?
Quizás, solamente una palabra,
que me quedé sin pronunciar.
Vendedor de Mentiras (20 feb 2006)
Vendedor, cuanto de publicidad has de saber
Para lograrme vender un producto que quizás nunca llegues a tener
Como duele saber que todo lo invertido corra ya por el agua del río
Y que te burlaste de quien en ti quiso creer
Cómo dueles en esos espacios tan llenos de nada
En las mañanas grises y en las noches heladas
Cómo dueles cuando las hojas caen y alguien las aplasta
Cómo dueles cuando este silencio calla
Y duele saber que nunca exististe, que caí envuelta por la mentira
Que fui quizás la única en creer tu pantomima
Pobre estúpida aquella que depositó su confianza
En un timador capaz de apuñalar por la espalda
Vendedor de ilusiones, vendedor de mentiras
Devuélveme la inversión, ya no te quiero en mi vida
Gran impostor, ladrón de sonrisas
No deseo tantos diamantes cayendo por mis mejillas
Fabricante de sueños, creador de pesadillas
No sabes cómo duele despertar y ver que todo fue mentira
Cómo me mata saber que me creí la publicidad
Y hoy por hoy, para nada sirven las garantías
Y me miras y sonríes como si nunca hubiera pasado nada
Y te siento tan frío que se me muere el alma
Cómo fui yo a caer en tus trucos, en tu publicidad barata
Y compré un producto que ni siquiera existía
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